miércoles, 9 de noviembre de 2016

Qué podemos esperar los latinos de la administración Trump

Por EBER HUEZO


El triunfo del magnate Donald Trump en las elecciones de los Estados Unidos ha generado incertidumbre entre los millones de latinos que esperábamos un rotundo triunfo de la demócrata Hillary Clinton que nos prometió una reforma migratoria para legalizar a millones de indocumentados que viven y trabajan en este país.
La incertidumbre viene además por las fuertes declaraciones anti inmigrantes del ahora Presidente electo, su intención de construir un gran muro entre México y los Estados Unidos y abolir las iniciativas ejecutivas del presidente Barack Obama que ha dado alivio temporal a millones de jóvenes soñadores y reformado el sistema de salud para darle cobertura médica a familias de bajos recursos.
El triunfo de Trump también a causado temor entre los latinos y otras minorías porque los demócratas durante su campaña satanizaron la imagen de un Trump como un ricachón frío, autoritario y egocéntrico, comparándolo en algunas veces como un futuro dictador racista al igual que lo fue Adolfo Hittler en Alemania antes de la segunda guerra mundial.
Este hecho movió intensas campañas para que residentes latinos se convirtieran en ciudadanos estadounidenses con la idea de arrasar las intenciones del magnate de convertirse en el nuevo Presidente de los Estados Unidos, en donde, de hecho, estuvo involucrado el gobierno mexicano y organizaciones convencidos que el voto latino definiría las elecciones del pasado 8 de noviembre.
Pasado el shock de los resultados de las elecciones, debemos sentar cabeza y volvernos a la realidad de nuestro futuro en este país, pues para comenzar, es mentira que de hoy en adelante tendremos a un dictador como Presidente.
Estados Unidos goza de un sistema democrático sin precedente. La Declaración de Independencia es el documento con el que proclama que todos los hombres han sido creados iguales y que están dotados de un derecho inalienable a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad, por lo que en este país se han mantenido "unidos e indivisibles", aún bajo las peores de circunstancias.
Podemos hacer constar las razones detalladas que hacen que esta nación mantenga un sistema democrático sólido y a su unión intacta. Pero fundamentalmente se basa en los principios de descentralización gubernamental, un sistema cerrado y justo de leyes, parámetros, regulaciones, educación en los valores democráticos y un absoluto respeto por la gran mayoría de los ciudadanos, en lo que se refiere a la constitución estadounidense entre otros innumerables factores que el espacio no nos permite mencionar.
Cualquiera que llega a la Casa Blanca debe regirse por estos principios constitucionales, por lo que se desmienten los rumores que las cosas pueden cambiar con Trump en la presidencia de los Estados Unidos.
Como Presidente, Trump tiene que tomar en cuenta a todos los estadounidenses, más del 40 por ciento de los votantes no estuvieron de acuerdo con su retórica de campaña, y si bien un 60 por ciento votaron por él por sus promesas, éstos no constituyen la mayoría. De hacerlo estaría dividiendo al país, tal como lo hizo en su campaña como una estrategia política para ganar el corazón de los que no estaban de acuerdo con la política de Obama y las promesas de campaña de Hillary Clinton.
Sus promesas de campaña son a mediano o largo plazo y necesita el respaldo total del Congreso como para aprobar el retirarse del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP), que todavía no está finalizado, y renegociar o desechar el Tratado de Libre Comercio para América del Norte que Estados Unidos tiene desde 1994 con México y Canadá.
Como presidente, Trump tiene cierto poder para aumentar los aranceles a países como China. Podría también retrasar el TPP, incluso, si el Congreso lo aprueba. Sin embargo, los economistas han advertido que tales movimientos dañarían la economía al forzar a los consumidores a pagar precios dramáticamente más altos por todo, desde refrigeradores a camisetas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario